lunes, 18 de octubre de 2010

ENTREPALERAS.

Se tiñe el cielo de nubes de tormenta
en el estío prematuro

de una tarde aún de primavera.

Sentada bajo la vieja palera,

con los pies desnudos

a la misma brisa que sus hojas acaricia,

cierro los ojos

y escucho el trino de las aves
amortiguado por el persistente chirriar
de las cigarras.

De vez en cuando
un goterón se desliza entre las ramas,

sobre mi piel semidesnuda,

“lágrima” de viejos árboles

que erguidos mantienen

aún su tronco hueco,

carcomido,

quemado incluso por el rayo.

Se llena el aire del polen de los chopos,
en el mismo lugar donde, en mi infancia,

sólo se levantaba la imponente figura

de paleras centenarias,

custodiadas bien de cerca

por el aroma dulzón de las acacias.

Entrepaleras lo llamaban.
...

Hoy la fuente-aljibe se encuentra descuidada
y la arena cubre la pradera…

Hoy los árboles parecen solitarios

y entres sus ramas no esconden ya

juveniles risas ni secretos ..

Quedan hoy pocas paleras,
pero alguna de ella

desafía aún el paso del tiempo

enredando entre sus ramas los recuerdos.

1 comentario:

  1. Enhorabuena, guapa, me alegro que por fin esto esté en marcha, suerte, te leeremos con asiduidad, un abrazo. Luego te añado a mi blog. un besazo Charo Acera.

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